Puede parecer imposible que gustándonos como nos gustan las series de fantasía, no hayamos hecho alusión a una de las más vistas y exitosas de la historia, que no es otra que la adaptación de la obra Canción de Hielo y Fuego de George R. R. Martin. A continuación detallamos la razón.
La verdad es que sí comenzamos a verla, ávidos tras leer sus libros de descubrir cómo sería su adaptación a la pantalla. Lo típico en estos casos, ver qué actor encarna a tal personaje, disfrutar con las ambientaciones y localizaciones elegidas y por supuesto, comprobar lo fieles que iban a ser a la trama. Y aquí fue donde comenzaron los problemas, porque tras un par de capítulos, o tres a lo sumo, las frases "eso no sucedió así" o "eso no aparece en el libro" fueron tan frecuentes que decidimos dejarlo.
Como lectores fieles a la obra de Martin y, sobre todo pacientes, dada la reserva y retrasos acumulados en la publicación de sus tomos, nos sentimos dejados de lado e incluso ofendidos ante el fulgurante estreno temporada tras temporada de la serie, mientras nosotros seguíamos esperando la llegada de los dos últimos libros de la Canción.
Antes de que la versión televisiva fuera un hecho, existía el temor de que Martin dejara inconclusa su obra maestra. Se barajaban dos motivos, uno que no supiera cómo acabarla con tantas tramas abiertas como tenía, y otra que, debido a su avanzada edad, cualquier día nos diera el susto y abandonara este mundo dejándonos a todos con la miel en los labios. A día de hoy, ambas hipótesis han quedado descartadas porque la serie tiene final, más o menos distinto que los libros (eso ya se verá), Y Martin goza de buena salud para seguir adelante, o por lo menos si él no lo hace, es posible que otro escritor tome su relevo y acabe con la bíblica tarea de finiquitar la Canción.
Llegados a este punto, comentarios del propio autor apuntan a que en julio de este año pueda tener listo el sexto libro de la serie, titulado Vientos de Invierno, al menos en inglés, que en español ya será otra cosa. De no hacerlo, comenta Martin que se encerrará para terminar la obra. De hecho, el asunto del coronavirus puede haber ayudado de forma indirecta a que el autor avance en sus libros, ya que el confinamiento digamos que le ha obligado a permanecer en casa trabajando en ellos. De todas formas, sin hacernos muchas ilusiones, porque Martin no es muy fiel a su palabra, hasta navidades por lo menos no creemos que estén disponibles.
A esperar tocan, cosa que sabemos hacer muy bien.
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